Nuestro manifiesto

Espacio Serena nace del deseo profundo de vivir con calma y autenticidad.

Es un espacio que invita a conectar con lo esencial: nuestro ritmo interno, el bienestar verdadero y la belleza de lo simple.

A través de papelería minimalista y experiencias de comunidad, nos acompañamos en la búsqueda de una vida más lenta y más consciente.

Creemos en el poder de la pausa, en la suavidad como fortaleza y en la planificación como una forma de autocuidado, no de autoexigencia.

Este proyecto existe para recordarnos, cada día, que merecemos habitar nuestra vida con intención.

El porqué

Durante mucho tiempo intenté hacer las cosas "como se supone que deben hacerse".

Quise mostrarme profesional, fuerte, demostrar que podía con todo... incluso cuando me sentía agotada. Trabajaba día y noche, con un bebé en brazos, en plena pandemia, sin parar, sin escucharme. Hasta que colapsé.

Entendí que vivir así no era sostenible. No quería seguir alimentando una forma de hacer que me alejaba de mí misma. Y fue desde ese momento de quiebre que nació lo que hoy llamo Espacio Serena.

Un proyecto que comenzó como un susurro interno y que hoy es mi manera de recordarme —y recordarte— que existe otra forma de vivir y crear.

Una más amable y lenta, más consciente.

Diseño papelería minimalista hecha a mano que no busca que hagas más, sino que te conectes con lo esencial. Que te acompañe a planificar desde la calma, a construir hábitos que te nutran, a vivir con intención y presencia.

Cada producto y experiencia que nace en este espacio lo hace desde el disfrute, desde el deseo profundo de ayudarte a organizar tu vida sin exigencias vacías, sin la presión constante de tener que rendir.

Espacio Serena es un refugio hecho de pausas, de silencios necesarios y de la constante búsqueda del bienestar.

Creo que merecemos un espacio que nos devuelva al centro, que nos invite a respirar más profundo y a crear una rutina en la que podamos habitar con autenticidad.

Este es mi compromiso: seguir creando desde el amor y no desde la prisa.

Seguir recordándote que no estás sola.

Y que puedes construir una vida más presente y más tú.